Brebajes

miércoles, 4 de abril de 2012

Niebla mental




Siento como las barreras aprietan fuerte, el destino incierto.  Un día es feliz la nereida, bajo el mar jugaban los hipocampos sin temor a las fuertes corrientes. Ahora todo da un giro, frustración moderada por un sentimiento de aspereza mental, encubierta por el temor a lo desconocido. Saber que eres bueno en fuego, agua, tierra y aire y aún así no perteneces a ningún elemento. El compañero atópico sigue presente todas las noches, extraño a la corpórea ninfa que era exquisita para los ojos, velo por el sufrimiento que yo mismo he causado. Y el amor llega otras veinte mil veces, y ya no le creo. Rompemos las olas entre susurros de seducción nadie sabe que pasa en realidad dentro del oscuro remolino. 



1 comentario:

Arizbeth Palacios dijo...

Tus letras definitivamente, implican emprender un viaje hacia un lugar nuevo y mágico (:
Un Placer.