Brebajes

lunes, 12 de diciembre de 2011

Fractales Sonámbulos




La calle de los deseos, suspiraba frio por las madrugadas.  En una mágica glorieta en llamas, arde con hermosura el arcoíris. Después de aquel suspiro, cae una lluvia de mandrágoras.
No podía distinguir entre mi llanto y la lluvia, ¿acaso el iris de la nostalgia reflejaba aquellos colores? Prisma  anhelado de corazones; amados que llaman una y otra vez a la puerta y sin embargo, ésta sigue fuertemente cerrada.
Olvide tantos recuerdos a petición de tus ojos, como gusanos carcomen mis entrañas,  los afilados secretos van rompiendo lentamente la poderosa piel del leopardo.
Siluetas rotas de cosmogonía, espectros mitómanos en el limbo, decidí caer en el caldero de la quimera, me ahogué toda la noche en sus pensamientos,  y al  enterarme de tu suerte moribunda, mi  sangre se convertía,  poco a poco en vapor. 

Después de un dolor  placentero, partimos en el mismo submarino hacia la nada, que tenía todo lo que deseábamos.  Con tu cabello de ébano negro,  giraban las luces, iluminando la aurora de medianoche
En la profundidad de los mares, desciende la temperatura.   Tus manos exploran  mis sonámbulos dedos,  se tocan las mentes en un vaivén de medusas, llega de nuevo el cálido destello cuando bailan desnudas en un ocaso de almas.
Rotaciones intrépidas, me causaron alguno que otro desmayo,  pero recupere la energía de tus largos abrazos, donde las espirales cedían la palabra al oasis de máximos difráctales. 

Etéreo el firmamento, nos envía telegramas, la distancia corrompe los sueños más divinos, donde el paraíso nos llama a través de las nubes.
Despido mi desvelo, al ritmo de los amantes, entre la geometría perfecta se disuelven todas aquellas promesas, donde la comunión de los vértices,  devora la danza de los mándalas. Nigromantes flores perfumadas aparecen desde las sombras,  este amor por la vida pinta  una excelsa apoteosis. Descubre al humano de luces,  en un mitológico orgasmo.



S. 9.D.2011